El control de esfínteres es una situación que en ocasiones puede generar nerviosismo o estrés en la familia, los padres pueden sentirse abrumados y pueden general incluso tensión con el
propio niño/a. Además al propio niño le genera malestar, interfiriendo de forma negativa en las actividades del niño.
Antes de alarmarse hay que tener en cuenta la edad de inicio de control de esfínteres, la cual suele comenzar a las 18 a los 24 meses, ya que depende del grado de madurez, de los músculos y de
los nervios que hacer posible ese control. En primer lugar suele adquirirse el control de la defecación y posteriormente la micción.
Siempre hay que tener en cuenta que el desarrollo de los niños/as no es exacto, algunos pueden hacerlo antes o después sin que sea un problema, pero en ocasiones este proceso se complica.
Los problemas de la eliminación en la infancia son muy comunes, a veces nos encontramos con niños/as que a ciertas edades todavia no tienen un control sobre sus esfinteres, o que ya lo tenian
pero lo han perdido.